En el 2050, la población mundial tendrá tres mil millones más de habitantes en el planeta, es decir, más bocas que alimentar cuando actualmente el 80% de los terrenos cultivables ya está siendo utilizado. El mundo necesitaría un nuevo pedazo de tierra del tamaño de Brasil para poder satisfacer toda la demanda por alimentos que habrá en unos 40 años. Será una situación complicada, pero que ya vislumbra una solución: el proyecto de las granjas verticales.
Desde el año 2000, el profesor Dickson Despommier de la Universidad de Columbia, trabaja con sus alumnos desarrollando un proyecto ambiental que consiste en la creación de enormes edificios vidriados con paneles solares en su cubierta, con pisos transformados en un gran invernadero lleno de vegetales, para ser construidos dentro áreas urbanas consolidadas. Es difícil de imaginar, pero si la creación de las ciudades se produjo a partir del desarrollo de la agricultura, este proyecto podría transformar la historia de las futuras urbanizaciones y del uso del suelo planetario.
La idea consiste no solo en generar un espacio apto y controlado para el cultivo de frutas, verduras, cereales o animales de cría pequeños dentro de la ciudad misma, sino que éste sea autosustentable. La energía se recibiría de los paneles solares, complementados con incineradores que usarían los residuos de la granja como combustible. Asimismo, el sistema de riego permitiría el reciclaje del agua. De esta manera, el espacio rural liberado del cultivo de alimentos puede ser reforestado y transformado en pulmones verdes para el planeta.
El proyecto, más allá de lo utópico o costoso que podría ser, presenta múltiples ventajas. Primero que nada, las ciudades podrían ser realmente sustentables, al no consumir terreno fuera de sus áreas urbanas para satisfacer las propias necesidades alimenticias de los habitantes. De igual manera:
- Se reciclan los propios desechos de los cultivos (incluyendo el reciclaje del agua).
- Se reducen los costos de transporte campo-ciudad.
- Se asegura la producción de alimento durante todo el año en ambientes controlados.
- Se optimiza la superficie para cultivos.
- No hay riesgos ambientales importantes como sequía, exceso de lluvias, pestes, etc.
- Todos los cultivos serían orgánicos: no se necesitarían pesticidas o fertilizantes.
- Se crean nuevas oportunidades de trabajo dentro de la ciudad.
Tampoco puede negarse que hay muchas dudas sobre el funcionamiento de éste proyecto, porque no se sabe si será tan ventajoso como promete, solo resta esperar unos cuantos años para ver las ideas hechas realidad.
Fuente: http://www.plataformaurbana.cl/archive/2007/06/26/edificios-cultivables-densificacion-verde-para-la-ciudad/
Fuente: http://www.plataformaurbana.cl/archive/2007/06/26/edificios-cultivables-densificacion-verde-para-la-ciudad/
No hay comentarios:
Publicar un comentario